Hoy me han dicho que parezco murciélago, que algo me pasa, que algo tengo con la luz que no quiero verla, les dije que soy fotosensible, que necesito ocultar mi rostro de la luz del mediodía, que debo caminar rápido y cabisbajo para que los rayos del sol no me afecten.
Les he dicho que por la tarde-noche, cuando la luz es menos intensa y entra la obscuridad es cuando puedo caminar mas lento y levantar el rostro. Que el temor de encontrarme con la luz desaparece y puedo mas o menos ser el mismo.
¿Para qué quiero unos ojos si la luz no quiere verme?, ¿de qué me sirven los ojos en la obscuridad?
Pero lo que no se dieron cuenta es que en ambos instantes ya no sonrío
y mis ojos no tienen expresión
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