He visto una película donde una espada toda vieja, cubierta de herrumbe, cayéndose a pedazos fue sometida a un proceso de remanufactura. Este proceso inicia con la creación de un fuego intenso para colocar después a la espada vieja en ese nicho infernal. La vieja espada se pone al rojo vivo desde la punta hasta casi la cacha de la misma, no toda la espada está al rojo vivo porque sino, no podría manipularse. Después, se saca la espada de ése fuego intenso, se coloca en un yunque o espacio muy resistente como acero o concreto y al ponerla encima de dicho material, se procede a golpear muy fuerte a la espada en toda la sección de ella que está al rojo vivo, a cada golpe van cayendo uno a uno todos los pedazos de herrumbe, de vejez y va quedando un nuevo metal, se vuelve a repetir el proceso de fuego intenso-golpes hasta que ya no existen muestras de la vieja espada, bueno, solamente esa pequeña parte que está cerca del mango de ella. Esa pequeña sección que no puede ponerse al rojo vivo es la fuente de la próxima herrumbe, así que se debe lijar para dejar toda la hoja como nueva, al final, se tiene una nueva espada a partir de una espada vieja. Para terminar y como una purificación de la espada, se somete a una inserción en agua fría para al salir tener una espada mas resistente que es capaz no por si misma de causar daño, pero sí puede usarse para ello, una espada que no tiene vida, que no siente y no sabe lo que hace.
Ahora, se que esa película fue significativa porque es un reflejo de lo que me está sucediendo, se me está cayendo golpe a golpe, día a día, todo lo frágil que he sido para quedar al final un ser insensible(ojalá), duro (eso espero), sin sentimientos (eso anhelo), sin remordimientos(¿de qué?). Solamente ese espacio que áun falta del viejo YO tiene su tiempo de vida, ya se hasta cuando permanecerá, ¿poco o mucho tiempo aún? Solamente yo lo se. Una vez me quite de esa última parte de mí, ya no existirá forma de regresar hacia atrás.
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