Una foto tuya para el público.

No te preocupes, sabes bien que te he llamado Luna y me gusta ver al cielo.

Me voy a comprar este libro.

http://www.gandhi.com.mx/index.cfm/id/Producto/dept/libros/pid/474105

Ya comentaré en su momento cuando lo haya leído.

Otra canción

Pasaste a mi lado
con gran indiferencia
tus ojos ni siquiera
voltearon hacia mi.

Te vi sin que me vieras
te hable si que me oyeras
y toda mi amargura se ahogó
dentro de mi.

Me duele hasta la vida
saber que me olvidaste
pensar que mil desprecios
merezca yo de ti.

Y sin embargo sigues
unida a mi existencia
y si vivo cien años
cien años pienso en tí.

Pasaste a mi lado
con gran idiferencia
tus ojos ni siquiera
voltearon hacia mi.

Te vi sin que me vieras
te hable sin que me oyeras
y toda mi amargura se ahogó
dentro de mi.

Me duele hasta la vida
saber que me olvidaste
pensar que mil desprecios
merezca yo de ti.

Y sin embargo sigues
unida a mi existencia
y si vivo cien años
cien años pienso en tí.

Canción.

Se te olvida
que me quieres a pesar de lo que dices
pues llevamos en el alma cicatrices
imposibles de borrar

Se te olvida
que hasta puedo hacerte mal si me decido
pues tu amor lo tengo muy comprometido
pero a fuerza no será

Y hoy resulta
que no soy de la estatura de tu vida
y al dejarme casi, casi se te olvida
que hay un pacto entre los dos

Por mi parte
te devuelvo tu promesa de adorarme
ni siquiera sientas pena por dejarme
que ese pacto no es con Dios

Y hoy resulta
que no soy de la estatura de tu vida
y al dejarme casi, casi se te olvida
que hay un pacto entre los dos

Por mi parte
te devuelvo tu promesa de adorarme
ni siquiera sientas pena por dejarme
que ese pacto no es con Dios

Hasta hoy.

En este momento en que termina el día, me he puesto como límite seguirme lamentando de mi dolor, de mi poca persona, de mis tristezas y desganas. De ahora en adelante a mirar al frente y seguir con mi vida. Tú, está visto llevas otro camino y no quieres vaya contigo, si me lees, si sabes quien escribe aquí lo sabrás, mañana seré otro y ni modos, espero por lo menos me saludes.
Hasta siempre y no dudes en llamarme si necesitas algo de este pobre ser.

Necesito que pase el tiempo.

Ya no quiero seguir sintiendo todo este dolor, estos celos, esta envidia, estos arrebatos tontos de alguien que quiere recuperar lo que ya se fue.
Pensé que me quería mas a mi mismo, que sabría afrontar tu partida pero no, tal parece que me ha dolido en extremo tu lejanía. Sigo preguntándome ¿hasta cuándo dejaré de lamentarme?
¿Qué gano con esperar tu regreso si ni una llamada, un mensaje o email mío aceptas? Casi todos tus conocidos me dicen "me envío (tu nombre) un archivo bien bueno" y yo: ¿si? ¡orale! ¡Felicidades!
Toda la semana, de Lunes a Domingo, de mañana y tarde. ¿Y yo? ¿Ni por piedad? ¿Y yo?

Te vi y saludé.

Tuve la oportunidad de estrechar tu mano, de dirigirte la palabra. Venías acompañada nuevamente de él, no podrás negar que venían muy contentos, dichoso él, que puede decirle a cualquiera (yo no pude ni siquiera darlo a entender alguna vez) que lo acompañas a donde sea y a cualquier hora.
Caí en tus palabras cuando preguntaste: ¿mucho que decir? Y por un momento pensé me darías la oportunidad de estar a solas contigo, pero no, simplemente me dejaste, me diste la mano de nuevo so pretexto de que "había mucha gente cerca", ¡Je!, también él estaba cerca, estaba en el mismo edificio donde seguramente te vería de nuevo y te acompañaría de regreso. Debí haberte dicho que hasta unos minutos antes de verte tenía mucho que preguntar, pero al verte con él, ya no tenía dudas, todo ha sido tan claro, desde ése momento tuve la seguridad, mas no el valor, de que entre nosotros todo terminó. He de practicar mis respuestas, tengo tiempo a partir de hoy, ya nada de preguntas, todo es certeza.
Ni modos. ¿Sabes? Me gustaría ser tan "hombre" para decir: "me vale madre, ahí nos vemos", pero no puedo, este que soy, tal parece que no acaba de entender que tú tienes ya con quien sonreir.
¡Qué poco ser me siento! Y para colmo irte a buscar y no encontrarte, ¡Ja! Eso es ser doblemente necio y pentonto ¿verdad? De seguro si leyeras esto te reirías de mí. Ojalá tuviera el valor de dejarte de lado así como tú lo hiciste conmigo.

De nada sirve.

Ahora, hasta ya no quieres que nos vean juntos.
¿Tienes miedo que él se ponga celoso de mí?
Solamente dile que ya no te importo, que ya estoy consciente de que no soy importante para tí.

¿Porqué estas palabras? Porque tanto silencio me hace pensar que tú ya deseas tu libertad completa, sin preocupaciones, sin límites. No puedes negar que cuando ibas con él y me viste, preferiste su compañía que la mía. Ni modos, tú tienes la oportunidad de poder elegir dentro de las tantas personas mejores que yo.
De veras que te extraño y estoy seguro no regresarás.
Sigo cambiando, espero que algún día cuando me dejes verte no te espantes de quien sea.

Mi sueño imposible, contigo.

Era su silueta cada noche en la ventana,
una fantasía convertida en realidad
en la ceremonia antes de dormir se preparaba
algo de gimnasia para estar en vaya forma.

Luego la piyama terminaba en show,
sólo algunas veces mi conciencia me pegaba
aquello era ya una aficción,
nunca pude hablarle cuando estuve cerca
ni saber su nombre ni ella mi aficción,
hoy que se ha marchado vivo prisionero de aquella angelical visión.

Nunca estuviste conmigo y tus tres lunares de memoria sé
el de la rodilla, el de tu mejilla, y el que sólo yo podría morder.

Hasta con los ojos cerrados esos tres lunares podría yo encontrar
el de la rodilla, el de tu mejilla y el que sólo yo podría devorar.

Y si apareciera frente a tu ventana, por favor, me llamas a esta dirección
no intentes mirarla, haz lo que te digo,
los lunares causan la atención.

Nunca estuviste conmigo y tus tres lunares de memoria sé
el de la rodilla, el de tu mejilla, y el que sólo yo podría morder.

Hasta con los ojos cerrados esos tres lunares podría yo encontrar
el de la rodilla, el de tu mejilla y el que sólo yo podría devorar.

Recuerdo bien su silueta frente a mi ventana tras de su balcón
en la ceremonia antes de dormir

Nunca estuviste conmigo y tus tres lunares de memoria sé
el de la rodilla, el de tu mejilla, y el que sólo yo podría morder.

Hasta con los ojos cerrados esos tres lunares podría yo encontrar
el de la rodilla, el de tu mejilla y el que sólo yo podría devorar.

me tomaría una vida esos tres lunares poderme yo olvidar...

Fui a buscarte.

Y no te encontré, me dijeron habías salido a realizar unos trámites y me di la vuelta, solo agradecí el informe y listo, de vuelta al pasillo.
En el trayecto, apliqué la técnica de ayer: caminar rápido y ver solo lo indispensable para no caerme.
Cuando entré a uno de las secciones lo encontré a él, escribiendo un mensaje y mis celos se fueron a lo máximo de solo imaginar que ese mensaje fuera para tí y tú le contestaras.
¿Porqué debo estar celoso si ya no te intereso? No lo sé.

Es tonto darme cuenta.

Que siendo como soy, algún día cuando vuelva a verte, estaré lleno de nervios y todos mis celos y dudas y temores presentes desaparecerán por lo menos un instante, aunque después regrese la tristeza de ya no tener la oportunidad de antes y saberme fuera de tu corazón y pensamiento.

Es increible.

Que después de tantos desprecios a mis mensajes, chats, llamadas y correos electrónicos, todavía siga esperando a que aparezca un "hola" tuyo en mi chat jajajajajajajaja.

He despertado.

Ha sido una noche larga y pesada, he dormido bastante y no siento descanso, estoy cansado, dolido, molido, con sueño, triste.

Ha sido una noche creo yo, de no recordar, porque mi mente no me da indicios de que es lo que soñé.

¿Porqué?

¡Ajá! ¿Porqué mi ser se rehusa a creer que ya no soy importante para tí?

Dejo a mi cerebro ser lo mas frío posible para que todo YO sepa que no debe buscarte, pero mis manos están ansiosas de tí, mis labios te buscan.

Mis ojos aún están con la imagen tuya de ayer y tu compañero de plática y mi cerebro no logra borrar todos los celos y coraje sentidos.
¿Hasta cuándo seguiré así?

Caminar.

Hoy he realizado dos cambios: mi andar y mi vista.

En cuanto a mi andar a diferencia de la lentitud y el cansancio reflejado, hice que mi cuerpo caminara mas rápido, ¿porqué? bueno, para que por si de casualidad me llegaras a ver pudieras esconderte poco tiempo y mi presencia en tu día fuera mínima. La otra ventaja es que si tú ibas acompañada de nuevo como el día de ayer, no viera por mucho tiempo lo feliz que vas a ir de seguro (ojos que no ven ...).

Por lo de mi vista, bueno, es muy sencillo, solamente camino mirando al suelo, porque de verte te busco y me pongo a platicar contigo y de seguro interrumpo tu compañía y tu sonrisa sería cambiada a un dejo de fastidio.

Se que me costará volverte a encontrar, el tiempo será el único capaz de disminuir todos estos sentimientos tan negativos que tengo en este momento.

Son las once en punto.

Y sigue la ausencia de tus palabras y de tu voz, de tí, confirmo que ya no soy importante para tu vida.
Que el tiempo está curando tus heridas y tienes planes donde no estoy.
Es iluso pensar que aún quieras algo de mí, quiero creer que las personas quienes te rodean son mucho mas que yo en este momento.
Pero ¿de qué sirve esperar? ¿de qué sirve pensar? Si lo que me pideste es silencio, ausencia, lejanía.
Supongo quieres alejar de tí a aquellos que te han hecho daño de alguna forma.
Estoy mas triste que ayer, pero ahora tengo una sonrisa fingida y menos suspiros.

Te he visto de nuevo.

Te he vuelto a ver e ibas de blusa amarilla y pantalón de mezclilla, ibas muy contenta al lado de la persona que te gusta.

Ibas sonrisa y sonrisa a su lado, yo solo pude verte desde lejos.

Se que me viste y volteaste, eso fue duro, es difícil de asimilar.

Lo escribo aquí porque se que ya no lees este espacio, ya no te importo, lo veo, lo demuestras.

No te enviaré mensaje porque de nada sirve cuando no te molestas ya en saber de mí, de nada sirve ya cuando soy una carga para tí.

Dichosos ellos que tienen lo que yo no puedo darte, dichosos ellos que pueden estar a tu lado, dichoso aquel a quien tú elijas(si no es que ya lo elegiste). Dichosos ellos que no reparan en llamarte y no tienen que pedir permiso ni esperar mas de una vez la llamada. Dichosos ellos que no sufren por tu ausencia, ellos no te han hecho daño supongo.

Los envidio en estos momentos en que me siento el pendejo mas grande del mundo. El idiota con cara de tristeza y andar de anciano. En estos momentos en que poco a poco veo como soy el único nada importante para tí.

¿Quiénes entienden?

¿Él, estando aún a tanto tiempo y kilómetros?
¿Ese que vigila que esté limpio el espacio donde te encuentras ? Y ahora hasta te acompaña.
¿Ese que te ha robado un beso así porque sí?
¿Ese que te ve y tú negabas que te veía?
¿Ellos a quienes aún contactas?
¿Ellos con quienes entablas llamadas y les sonríes?

¿Ellos sí entienden?


Tal parece que el único errado, el único tonto en todo esto soy YO, por no entenderte.

Acerca de partir y regresar.

Cuando viajas por largo tiempo, cuando abandonas tu estancia, cuando decides aislarte del mundo para bienestar tuyo, sin importarte los demás. Cuando crees y sabes que haces lo correcto al dejar de lado la carga y centrarte en tí, en tu búsqueda personal. No ocurre nada extraño para tí, no pasa nada alrededor, solo en tí, el crecimiento es tuyo y los demás, los demás, no importan o no son necesarios.

Si regresas, si decides regresar, encontrarás de nuevo a la misma gente, sí a la misma gente de seguro, lo que no puedes garantizar es que las encuentres igual, que las reconozcas, de seguro han cambiado al igual que tú.

Si piensas que a quienes dejaste en el camino estarán junto a tí sin preguntas y sin respuestas, es posible que se trate de tus amigos esos seres que están en este momento contigo.

Los que has dejado de lado, los que son dispensables, esos, son a lo mucho, conocidos tuyos, gente a la que se puede estimar y no más.

Quienes te han buscado y no encontrado, los que han gritado tu nombre y no han encontrado ni eco, quizá ya no los encuentres, quizá, estén ahí, pero talvez de tanto gritar y escribir se han quedado sin voz y sin palabras y será difícil volver a reconocerlos, quizá ellos te reconozcan, pero ya no se atrevan a llamarte.

Con los que sigues, con los que estás, a los que desde tu lejanía sigues contactando y comunicando, ellos, siempre estarán contigo, ellos, tus amigos, a los seres que realmente quieres, ellos, podrán suplir en tu regreso a esos que ya que dejaste de lado y no te buscarán más.

No veo a donde.

Así es, no veo a donde lleva este camino de silencio, no veo a donde me llevará o
donde te está llevando tu camino. Me haces a un lado peor que a una carga ¿eso soy ahora?

Silencio, silencio, negativas, bueno, ¿cuál negativa cuando no hay respuesta?

No entiendes lo que pasa en mí, no sabes lo que siento, lo que pienso, lo que..., ¿te importa acaso saberlo?

Si tan siquiera yo supiera ser como tú.

Se que puedes.

Vamos mujer, tu puedes, ojalá puedas leer esto pronto para que sepas que sigo esperando.

Cuídate mucho por favor.

Te mando un gran abrazo.

Diferencia

Estoy analizando estos momentos, estos días, de tu silencio, busco en los anales de mi chat y mi correo, encuentro la historia nuestra, ya hemos pasado por esto antes, no es nuevo, no es la primera vez.

¿Cuál es la diferencia? Antes me desesperaba, te buscaba, por chat, SMS, email, llamada. ¿Ahora? Solo se que la experiencia me dice que debo dejarte ser, esperar a que regreses, si es que tienes planeado regresar de donde nunca partiste.

No he dejado de estar donde puedas encontrarme, solamente estoy esperando me hagas saber que tú también estás ahí.

Otro plagio.

No es que muera de amor, muero de ti.
Muero de ti, amor, de amor de ti,
de urgencia mía de mi piel de ti,
de mi alma, de ti y de mi boca
y del insoportable que yo soy sin ti.

Muero de ti y de mi, muero de ambos,
de nosotros, de ese,
desgarrado, partido,
me muero, te muero, lo morimos.

Morimos en mi cuarto en que estoy solo,
en mi cama en que faltas,
en la calle donde mi brazo va vacío,
en el cine y los parques, los tranvías,
los lugares donde mi hombro
acostumbra tu cabeza
y mi mano tu mano
y todo yo te sé como yo mismo.

Morimos en el sitio que le he prestado al aire
para que estés fuera de mí,
y en el lugar en que el aire se acaba
cuando te echo mi piel encima
y nos conocemos en nosotros,
separados del mundo, dichosa, penetrada,
y cierto , interminable.

Morimos, lo sabemos, lo ignoran, nos morimos
entre los dos, ahora, separados,
del uno al otro, diariamente,
cayéndonos en múltiples estatuas,
en gestos que no vemos,
en nuestras manos que nos necesitan.

Nos morimos, amor, muero en tu vientre
que no muerdo ni beso,
en tus muslos dulcísimos y vivos,
en tu carne sin fin, muero de máscaras,
de triángulos oscuros e incesantes.
Muero de mi cuerpo y de tu cuerpo,
de nuestra muerte ,amor, muero, morimos.
En el pozo de amor a todas horas,
inconsolable, a gritos,
dentro de mi, quiero decir, te llamo,
te llaman los que nacen, los que vienen
de atrás, de ti, los que a ti llegan.
Nos morimos, amor, y nada hacemos
sino morirnos más, hora tras hora,
y escribirnos y hablarnos y morirnos.